Karrera Oficial. : Semana Santa de la provincia de Sevilla: Cantillana

Se encuentra situada a 31 kilómetros de la capital de provincia, Sevilla. Cantillana se encuentra en el ángulo que forman la desembocadura del río Viar con el río Guadalquivir. Está situada dentro de la Vega Alta del Guadalquivir, lindando por el Norte con las estribaciones de Sierra Morena.

En Semana Santa podemos ver por su calles las hermandades:

* La Borriquita (Sábado de Pasión)

* Cristo de la Misericodia (Miércoles Santo)

* Hermandad del Conselo (Jueves Santo)

* Nuestro Padre Jesús Nazareno (Madrugada Viernes Santo)

* Hermandad dela Soledad (Viernes Santo)

Agrupación Parroquial de la Sagrada Entrada en Jerusalén

Fundación: 2000

Pasos: Uno

Día de Salida: Sábado de Pasión

Hábito: Túnica negra de cola y cinturón de esparto

Sede Canónica: Iglesia del Dulce Nombre de Jesús y Santa Misericordia

El Grupo de la Sagrada Entrada en Jerusalén de Cantillana nace en el año 2000, cuando un grupo de cofrades decide fundar una nueva Hermandad dedicada a la Entrada Triunfal de Jesús en Jerusalén.

La idea se lleva ante el cura-párroco Don Fernando I. García Álvarez-Remetería que les brinda su apoyo, aunque tiene que esperar una respuesta del Consejo Pastoral de Cantillana, órgano con representación de las hermandades y otros colectivos cantillaneros, que respaldó la iniciativa de estos jóvenes cofrades.

La primera salida procesional la efectuó el Sábado de Pasión del año 2002, despertando una grandísima expectación en todo el pueblo y muy especialmente entre los niños, ya que popularmente La Borriquita, se ha asociado a los más pequeños de la casa.

Nuestro Señor Jesucristo

Se encargan a Juan Antonio Blanco Ramos, escultor sevillano, la Imagen Bendita de Ntro. Señor Jesucristo montado sobre su borriquita.

A finales de mayo de 2001, la imagen, toda dulzura, toda humildad, de ese Cristo que parece augurar todo un Camino de Pasión, llega a Cantillana y se procede a su bendición el Domingo de Pentecostés de ese año.

Tras esta primera salida procesional se decidió encargar un misterio al mismo autor de la imagen. Se completó en la Semana Santa de 2009 el Misterio de la Sagrada Entrada en Jerusalén, con la imagen de Santiago Apóstol.

Real Archicofradía del Santísimo Sacramento, Fervorosa Hermandad de Nazarenos del Santísimo Cristo de la Misericordia, Santa María de la Caridad, San Juan Evangelista y Santa Angela de la Cruz

Fundación: 1561

Pasos: Dos

Día de Salida: Miércoles Santo

Hábito: Túnicas colo hueso, capirote morado con botonadura del mismo color y cíngulo de color morado con zapatos negros.

Sede Canónica: Iglesia Parroquial de Nuestra Señora de la Asunción

Archicofradía del Santísimo Sacramento

El 6 de noviembre de 1561, según consta en los libros de visitas del Palacio Arzobispal, se aprueban las primeras Reglas de esta Archicofradía, siendo arzobispo de Sevilla don Fernando de Valdés, y quedando constituida en la iglesia parroquial de Cantillana con el título de "Archicofradía del Santísimo Sacramento". Sin embargo se cree que pudo ser fundada a principios de siglo a instancias de Teresa Enríquez de Alvarado, prima del rey don Fernando el Católico, dama que dedicó gran esfuerzo y fortuna en propagar el culto Eucarístico, fundando en 1508 la primera Hermandad Sacramental de España en Torrijos, a la que siguió otras muchas similares por toda España, algunas en Sevilla en el año 1511.

Desde su origen se asocia a la Hermandad con los Condes de Cantillana, que pasan a ser sus principales benefactores, según consta en el primer libro de matrícula que conserva la Hermandad, donde aparecen inscritos como hermanos de la misma.

Son pocas las noticias sobre la Hermandad durante los siglos siglo XVI y XVII, pero consta que su esplendor comenzó a fraguarse durante estas centurias, y como muestra se sabe que en en 1674 poseía de renta anual 85.000 maravedíes para misas y gastos generales.

Tras la guerra civil del siglo XX llegan años difíciles, pues a la pérdida de su patrimonio se suma la desaparición de un buen número de hermanos; y la archicofradía entra en un tiempo de crisis, superado gracias a la labor de personas que trabajan incansables por restablecer en ella su antiguo esplendor.

Cofradía de nazarenos del Santísimo Cristo de la Misericordia y Santa María de la Caridad

En 1954 un grupo de jóvenes decide, con la colaboración del párroco Francisco Márquez Sánchez, fundar una nueva hermandad que ocupase el vacío existente en Cantillana entre el Domingo de Ramos y el Viernes Santo.

Tras muchas reuniones, el 24 de abril de 1956 se constituye la primera Junta de Gobierno cuyos primeros objetivos fueron redactar las Reglas y dar un título a la nueva Hermandad. Aprobadas las reglas por la autoridad eclesiástica, se contrató con el imaginero sevillano Antonio Castillo Lastrucci la talla del Santísimo Cristo de la Misericordia, que fue entregado a la Hermandad en la cuaresma de 1957, año en que procesionó por primera vez (Miércoles Santo).

Fusión de ambas Hermandades

El 11 de febrero de 1977, las Juntas de Gobierno de la Archicofradía del Santísimo Sacramento y de la Cofradía de Nazarenos del Santísimo Cristo de la Misericordia deciden fusionarse para en el futuro pasar a constituir una sola, decisión que fue elevada a la autoridad eclesiástica para su aprobación, firmándose el acta de fusión en Sevilla el 12 de febrero de 1979 por el obispo auxiliar don Rafael Bellido Caro.

Santísimo Cristo de la Misericordia

Se contrató con el imaginero sevillano Antonio Castillo Lastrucci la talla del Santísimo Cristo de la Misericordia, que fue entregado a la Hermandad en la cuaresma de 1957.

Representa a Jesús Crucificado y Muerto en la cruz. De estilo Neobarroco y siguiendo los cánones de la escuela Sevillana posee unas dimensiones generales de 1´78 x 1,43 (Cristo) y 386 x 198 x 13 cm. (La Cruz). Morfológicamente presenta una gran frontalidad y verticalidad sin apenas movimiento. La cabeza se encuentra inclinada y girada hacia el lado derecho, apoyando el mentón sobre el tórax.

El sudario trabajado en minuciosos pliegues, se encuentra sujeto por medio de una cuerda, dejando al descubierto la cadera derecha, produciendo gran esbeltez y leve movimiento en la imagen.

Las piernas, bien proporcionadas y con cierta contracción presentan una disposición frontal y algo arqueadas. Los pies se clavan el derecho montado sobre el izquierdo. La policromía es única y original en tonos ocres y está ejecutada al óleo pulido con veladuras, patinas superficiales y finos regueros de sangre. En resumen se trata de una escultura de una gran dulzura y elegancia, con buena categoría artística, enmarcada dentro del más puro estilo neobarroco del siglo XX. Posteriormente a su ejecución. Ha sido restaurado por Francisco Buiza en 1969 y por Gutiérrez Carrasquilla en el 2002

Los dos primeros años la imagen del Cristo salió en un paso de la Hermandad de La Soledad, que lo prestaba para tal fin. Poco después, en 1959, se adquiere el paso de Nuestro Padre Jesús de las Penas de las Penas de la parroquia de San Vicente de Sevilla, para que desde entonces procesionara en Cantillana con el Cristo de la Misericordia.

Santa María de la Caridad

Años más tarde fue tallada la imagen de Santa María de la Caridad por Francisco Buiza Fernández, que sería bendecida el 8 de diciembre de 1971.

El coste la misma ascendió a 30.000 pesetas, además de la efigie, Buiza restauro la imagen del santísimo cristo de la Misericordia. Mide 1´64 y de ella destaca la tristeza de su expresión y su boca entreabierta dejando ver la lengua y los dientes, igualmente destaca sus manos y el pelo tallado.

Durante varios años procesionó el miércoles santo a los pies del Santísimo Cristo de la Misericordia, ahora realiza estación de penitencia bajo palio recorriendo las calles de Cantillana siguiendo al Santísimo Cristo.

Hermandad del Consuelo

Fundación: 1701

Pasos: Uno

Día de Salida: Jueves Santo

Hábito: Túnica con capa y botonadura color crema.

Sede Canónica: Ermita de San Bartolomé

A la hora de abordar la historia de nuestra hermandad nos encontramos con el grave hándicap de que nunca hasta fechas muy recientes se había escrito nada al respecto, solo contábamos con relatos horales y algún documento suelto. A partir del primer numero del boletin de la Hermandad se comienzan a recopilar datos, testimonios y documentos con el proposito de reflejar el devenir de los mas de dos siglos de existencia de la devoción cantillanera a la Virgen del consuelo. Un reciente documento del Palacio Arzobispal, firmado por el Cardenal Aarzobispo Carlos amigo Vallejo, reconoce a esta hermandad como antigua y da fe de su existencia desde tiempo inmemorial.

La primera aseveración clara es que desconocemos los orígenes precisos de la misma. En un documento hallado en el archivo Capitular de Sevilla y fechado a finales del siglo XVIII encontramos la primera referencia testimonial escrita de la existencia en Cantillana de la Virgen del Consuelo. En el mismo se recoge un inventario de todos los objetos de culto e imágenes que se hallan en San Bartolome en esos momentos; la Virgen del Consuelo aparece ya con altar propio

El primer testimonio devocional de interés que se hace referencia a la Virgen del consuelo de una manera nítida se ha encontrado en un curioso cuadro que se halla en una casa de la calle San Bartolome. Se trata de un exvoto que unos fieles dedicaron a la Virgen del Consuelo en señal y recuerdo de un benéfico recibido. La pintura recoge una escena cargada del tipismo propio del siglo XIX andaluz, de bandoleros y sierra, en la que se reproduce el motivo por el cual estas personas se encomendaron a la Virgen, esperando su gracia. La pintura ofrece además otro dato de interés ya que en ella encontramos la primera usanza de la época, completamente de negro en actitud doliente y con el puñal de los siete dolores de Maria en el pecho.

Otro capitulo importante es el que corresponde a los hechos que acontecen durante 1936. Versiones orales parecen apuntar de que es José Arias Olavarrieta quien comunica de forma confidencial a José Dorado Rico, su intención de trasladar la imagen de la Asunción a un lugar seguro ante el periodo de inestabilidad que se vive en el país tras la elecciones generales de1936 y le recomienda hacer lo mismo con la Virgen del consuelo, mas aun teniendo en cuenta las circunstancias que acontecen en San Bartolome. El mayordomo habría de trasladar en secreto la imagen de la Virgen a su domicilio, sitio en la actual calle Real, esquina con el Ejido y la callejuela del Herrero. Aunque algunas versiones que circularon por Cantillana apuntaban a que la Virgen permaneció escondida en un ataúd de los que fabricaba el mayordomo, Nuestra Señora del Consuelo se oculto dentro de un cajón de madera que se situó dentro de un armario de obra situado en unas de las habitaciones del ala izquierda de la casa. Los enceres de la Virgen también se encontraban en dicho domicilio, lugar habitual donde se guardaban, y no sufrieron tampoco ningún deterioro.

Nuestra Señora del Consuelo

No es posible establecer la autoría de la imagn, si bien durante una época se especuló con la atribución a Juan de Astorga, estudios recientes realizados a la talla parecen descartar tal atribución.

En la actualidad la Hermandad realiza su estación de penitencia en la tade noche del Jueves Santo a la Iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Asunción desde la ermita de San Bartolomé, sede canónica dela hermandad.

Procesiona con un único paso, en este caso un paso de palio con la Virgen del Consuelo. En 2008 fue bendecida la imagen de San Juan Evangelista, que desde entonces acompaña a la Virgen del Consuelo.

Muy Antigua Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno, Señor de los Pescadores

Fundación: 1674

Pasos: Uno

Día de Salida: Madrugada Viernes Santo

Hábito: Túnica de cola con capirote color morado y cíngulo amarillo.

Sede Canónica: Iglesia Parroquial de Nuestra Señora de la Asunción

La Hermandad da culto desde tiempo inmemorial a una imagen de Jesús Nazareno cuyo autor es Pedro Roldán, tallada en madera de ciprés en el siglo XVII. Las primeras noticias que se poseen datan de 1674, fecha que puede tomarse como fundamental de la Hermandad.

Durante muchos año Nuestro Padre Jesús estuvo sin una Hermandad que lo representara; no tenia hermanos de cuotas ni ninguna fuente de ingresos, siendo siempre una Hermandad humilde de pocos recursos económicos, pero de gran fervor popular, siendo la imagen más visitada por todos los cantillaneros. Durante este período de tiempo el Señor estaba cuidado por una familia, que se encargaba de cuidar los enseres y la imagen y corrían con todos los gastos que se originaban, tanto en la salida como en los cultos de quinario.

Esta es la familia Sarmiento, siendo unos de sus miembros quien mas tarde sería, junto con descendientes de los pescadores de antaño, quien formalizaría la Hermandad, de nuevo recuperando a los hermanos de cuotas y formando una Junta de Gobierno, la cual precedería como hermano mayor Antonio Sarmiento Solís.

Nuestro Padre Jesús Nazareno

El autor de Nuestro Padre Jesús Nazareno es Pedro Roldán, tallada en madera de ciprés en el siglo XVII.

En domingo de cuaresma la sagrada imagen está durante todo el día expuesta en besapiés. Nuestro Padre Jesús Nazareno es conocido como el «Señor de los pescadores», por ser éstos los que por tradición transmitidas de padres a hijos eran los portadores del paso. Este paso se portaba en manigueta y cada familia tenía destinada una, padre a hijo.

La Junta de Gobierno empezó a agradecer a la Hermandad con la adquicisión de un paso nuevo tallado y dorado hecho en los talleres de Antonio Díaz en el año 1979. El paso seguía manteniendo las maniguetas pero era más pesado que el anterior. Dichas maniguetas corrían dentro del paso y tenían que meterse dentro para poder llevarlo.

El paso se estrenó en color de madera y se fue dorando en varios años. Debido al peso la Hermandad toma la decisión de ponerle trabajaderas y crear una cuadrilla de hermanos costaleros, y en el año 1983 es llevado por los hermanos, siendo el capataz Jesús Reina Nuñez.

La Hermandad es filial de la Hermandad del Silencio de Sevilla y como ella posee una cruz de carey que data del año 1711, obra de Diego Calbete, ebanista, y Francisco de Pilar, maestro carpintero. Esta cruz fue restaurada en 2003 por Rafael Ruiz Amores, quien realizó un gran trabajo de restauración debido al mal estado en la que se encontraba. Desde este año la cruz está expuesta en la capilla del Señor. También posee un estandarte o bacalao hecho en Brenes en los talleres de las hermanas Rama de Cantillana, bordado en oro, en el cual se encuentra el escudo de la Hermandad, y que se estrenó en el año 1997.

Además posee cuatro ángeles pasionarios que portan detalles de la Pasión y acompañan al Señor en el paso. Posteriormente se agregó otro ángel que va soportando la cruz a cuesta, una talla en madera de ciprés, de cuerpo entero, que tiene todo los detalles del suplicio al cual fue sometido el Señor; tiene en la espalda las marcas de los latigazos, las rodillas destrozadas de las caídas, y la cara ensangrentada; pero su mirada dulce y humilde traspasa a todo el que la contempla llenándolo de una gran paz.

Hermandad Servita y Cofradía de Nazarenos del Santo Entierro de Nuestro Señor Jesucristo y Nuestra Señora de la Soledad, Patrona Canónica de Cantillana, Adscrita a la Venerable Orden Tercera de Siervos de María

Fundación: 1521

Pasos: Tres

Día de Salida: Viernes Santo

Hábito:

Sede Canónica: Ermita de Nuestra Señora de la Soledad

La hermandad de la Soledad de Cantillana es una de las instituciones más antiguas de esta localidad. Cuatrocientos años de historia para un legado histórico grande que nació allá por mitad del siglo XVI. La patrona de Cantillana es una de las grandes devociones del municipio y actualmente se encuentra en puertas del 225 aniversario del Santuario de Nuestra Señora de la Soledad.

El origen de esta hermandad es muy confuso dado que no existen documentos fehacientes para poder confirma la fecha exacta de su nacimiento. El primer dato que se encuentra es un contrato con el pintor Juan de Santamaría fechado en 1583. La tradición marca que la imagen de la Virgen llegó desde Sevilla, en un barco a través del río Guadalquivir y una vez desembarcada en la Alameda de Hércules, fue montada en una carreta y llegó al pueblo de Cantillana, llegando hasta el lugar donde hoy día se encuentra en Santuario en su honor. Según cuenta la tradición, al llegar a esta zona, la carreta quedó atrapada por el barrio no pudiendo avanzar y por ello, el pueblo de Cantillana pensó que aquél era el lugar donde la Virgen de la Soledad deseaba que se le rindiese culto.

Más allá de la propia tradición, la hermandad de la Soledad de Cantillana tiene su fundación muy relacionados con la hermandad de la Soledad de San Lorenzo en la capital. La devoción que alcanzó esta corporación sevillana del convento casa grande del Carmen, lo que hoy es la Parroquia de San Lorenzo, fue tal que propició la fundación de numerosas hermandades en la provincia de Sevilla que nacían de esta devoción. Su forma de concebir la celebración de la Muerte, Entierro y Resurrección con el sermón del descendimiento y la procesión del entierro influye notablemente en la fundación de la hermandad de la Soledad de Cantillana, que se constituye con el fundamento de conmemorar la muerte del Señor.

Por tradición, se ha mantenido que los Condes de Cantillana fueron los impulsores de esta hermandad, aunque no constan documentos que lo acrediten, aunque sí puede afirmarse que los Condes de Cantillana fueron hermanos de la cofradía desde 1614 hasta el siglo XVIII

El Calvario

El paso del Calvario, también conocido como de San Juan y la Magdalena, es quizás, el conjunto procesional más genuino de la Semana Santa de Cantillana. No responde a ningún pasaje evangélico sino que surge ante la necesidad de reunir varios de los pasos que formaban el cortejo en uno solo.

La Cruz vacía es el símbolo por antonomasia de la Soledad de María y por extensión de la Cofradía, simboliza también la Resurrección de Cristo. La liturgia del Viernes Santo ordena que la Santa Cruz sea adorada, haciéndose ante la misma genuflexión, por ello antaño, cuando pasaba el Calvario por las calles, los fieles adoraban la Cruz, como consta por testimonios de los más mayores.

Delante del Calvario, al lado derecho se encuentra la Imagen de San Juan Evangelista, mientras que a la derecha, Santa María Magdalena, ambas son tallas para vestir del siglo XVIII, son los apóstoles de la Cruz, que acompañan en el duelo a la Santísima Virgen, formando parte del Entierro de Cristo que cada Viernes Santo rememora la Cofradía. La presencia del discípulo amado y de la Magdalena en el paso propicia que también sea conocido como “el paso de San Juan y la Magdalena”.

San Juan Evangelista

La Imagen de San Juan, responde al estilo de la segunda mitad del siglo XVIII, fecha en que la hermandad vive un periodo de gran esplendor y se construye el actual Santuario y todos sus retablos, así como la mayoría de sus Imágenes. Sus rasgos mantienen similitudes con las esculturas atribuidas a Bautista Patrone, del retablo de la Soledad.

Se trata de una escultura de tamaño natural para vestir, que posee ojos y lágrimas de cristal, destacando su expresividad.

Santa María Magdalena

La Imagen de la Magdalena comenzó a formar parte del cortejo del Santo Entierro a partir de 1722, primero en unas andas independientes, portadas por pocos hermanos, y al igual que san Juan, pasó después a formar parte del paso del Calvario o de San Juan y la Magdalena como también era conocido.

La talla comparte las mismas características que la de San Juan, pudiendo atribuirse también a Bautista Patrone, posee lágrimas y ojos de cristal, así como pelo natural. Al igual que el evangelista, posee un terno bordado por las hermanas Rama en el 2005 para la salida procesional o para el Septenario, en que suele formar parte del Altar de cultos.

Cristo Yacente

La antigua imagen del Cristo Yacente, conocido popularmente en Cantillana como “el Cristo del Sepulcro” por la valiosa pieza en la que históricamente ha salido en procesión y que le es consustancial a la propia imagen y a la procesión del Santo Entierro, es junto al crucificado de la Agonía, la imagen de Cristo más antigua de cuantas se conservan en Cantillana.

La imagen del Cristo, fue realizada en 1583 por Juan de Santamaria, conservándose el contrato de ejecución de esta, y otras imágenes, que supone por ahora el dato más antiguo que se conserva de la cofradía de la Soledad. Fechado en el 13 de enero de dicho año, Martin Blasco como “vecino de la Villa de Cantillana que soy al presente mayordomo de la cofradía de la Soledad de nra señora de la dha villa” concierta con Juan de Santamaría, ante el escribano publico Juan Bernal de Heredia a cargo por esas fechas del oficio 21, sito en la calle Tundidores, actual Hernando Colón de capital Hispalense, la realización de un conjunto de Imágenes con sus andas procesionales.

El Cristo Yacente es una imagen de tamaño natural con los brazos articulados que le permite la posición como crucificado, escenificar el descendimiento, y presentarse al culto habitualmente y salir en procesión como Yacente. Está realizado con lienzos y pasta de celulosa sobre una estructura de madera, la fragilidad del material en que está concebido ha supuesto que llegase hasta nuestros días en deficientes condiciones, a la que hay que sumar los empastes y repintes con pintura sintética que sufrió en una desafortunada intervención en los años de 1970.

Desde prácticamente su origen, la efigie fue cubierta con un paño de pureza o sudario textil, realizado con telas blancas almidonadas, y su cabeza cubierta con cabellera de pelo natural, hallándose en la última intervención restos de esta. En una determinada fecha, sus articulaciones fueron suprimidas, y después de concitar gran devoción durante pasadas centurias, fue cayendo progresivamente en el olvido y a la par degradándose su estado de conservación, hasta que la junta de gobierno de la hermandad expone a los hermanos la situación y en cabildo extraordinario celebrado para tal fin se aprueba emprender la restauración de la imagen, que lleva a cabo Miguel Ángel Fernández desde agosto de 2013 hasta marzo de 2014.

El 29 de marzo de 2014, Cantillana de nuevo pone los ojos en el Cristo yacente que es expuesto a la veneración de los fieles, tras la restauración en la que se consolida la escultura y se eliminan empastes y gran cantidad de repintes. En esta intervención se recupera las articulaciones de los brazos y es expuesto tras casi doscientos años como crucificado, causando gran expectación entre los hermanos y devotos.

Tanto para el altar, como para el Sepulcro, tiene un bello colchón y almohadón en raso crudo con interesantes bordados en oro del siglo XVIII; bellas potencias de plata del siglo XVIII rematadas en rayas con flores de lis en el centro y para el momento en que está crucificado así como para el descendimiento, corona de espinas de metal plateado. Con motivo de su reposición al culto, un grupo de devotos ofreció un antiguo sudario de tul bordado en hojillas con motivos pasionistas que se anuda mediante un cordón de terciopelo granate del que penden unas borlas de hilos de oro. A modo de mortaja cubre habitualmente la sagrada efigie una antigua mantilla de blonda.

Nuestra Señora de la Soledad

La Santísima Virgen de la Soledad es una bellísima imagen de candelero y de tamaño natural.

De autor desconocido y de principios del siglo XVI, puede considerarse una de las dolorosas mas antiguas de las que procesionan en Andalucía, es una talla de solemne frontalidad y regia figura, de marcado carácter arcaizante, los grandes ojos nos indica su vinculación con el goticismo tardío de la Sevilla del S. XVI, se aleja rotundamente del dramatismo barroco y se acerca a la serenidad renacentista, posteriormente ha sufrido varias restauraciones.

Posee ojos de cristal y pestañas postizas, las manos fueron talladas por Sebastián Santos Rojas en los años sesenta del siglo XX, posteriormente en Diciembre de 1993 fue restaurada por D. Francisco Ayala.

Esta imagen ha motivado la devoción de los Cantillaneros desde hace cinco siglos, siendo considerada desde entonces como Patrona de la Villa; presenta la iconografía habitual en este tipo de imágenes.

Fruto de la devoción que el pueblo de Cantillana le profesa, la imagen ha conseguido a lo largo del tiempo un importante ajuar del cual destacan el manto de salida en terciopelo negro bordado en oro por Juan Manuel Rodríguez Ojeda en 1894, la saya de salida, de las hermanas Antunez, el manto de camarín de Rodríguez Ojeda o la saya de Acantos realizada en el 2003 por las Hermanas Rama de Brenes y que reproduce la desaparecida saya de acantos de Patrocinio López.

Entre otras piezas de orfebrería, destaca la corona de salida de plata de ley sobredorada realizada por Palomino en el siglo XIX y que repite el esquema de las coronas realizadas por el mismo orfebre para la Virgen de Regla de los Panaderos o la del Socorro del Amor. Igualmente tiene otras dos coronas de diario, una de plata sobredorada realizada por Jiménez en 1992 y otra de plata del siglo XVIII. Igualmente posee una importante cantidad de broches, encajes para tocados, joyas, condecoraciones militares... la mayoría donación de sus hijos. Entre el valioso patrimonio de la hermandad, destaca el palio, todo en terciopelo negro bordado en oro por Rodríguez Ojeda a finales del siglo XIX, el paso del Sepulcro de estilo rocalla del siglo XVIII... pero la hermandad también ha perdido parte de su patrimonio como el antiguo palio de plata del siglo XVIII con los primeros versículos del "Stabat Mater", la media luna...