Historia de las Hermandades de Sevilla: San Benito





Hermandad del Santísimo Sacramento, Pontificia y Real Archicofradía de Nazarenos de la Sagrada Presentación de Jesús al Pueblo, Santísimo Cristo de la Sangre, Nuestra Señora de la Encarnación Coronada y San Benito Abad. 





Comienzos trianeros

Todo comenzó con un crucificado que el 1553 tallaba Francisco de la Vega y que encargaba Pedro Jiménez al que se le ponía nombre de Santísimo Cristo de la Sangre. Al año siguiente, el arzobispo Fernando de Valdés aprobaba las reglas de una hermandad que escogió como sede el convento de frailes de la orden mínima de Nuestra Señora de la Victoria de Triana. La hermandad se denominaba del Santísimo Cristo de la Sangre y Nuestra Señora de la Encarnación y estaba compuesta por carpinteros de ribera y calafates del puerto y su titular era la imagen que había sido tallada el año antes. Una década después, la hermandad adquiría un solar cercano para edificar una capilla y un hospital para dar culto al Crucificado y a la Virgen que en aquellos tiempos era una imagen de gloria.

La estación de penitencia tenía lugar en la tarde del jueves santo llegando hasta la parroquia de Santa Ana con la talla del crucificado. Fue en 1634 cuando la corporación cambiaba el día de salida al viernes santo para la que incorporaba ya la imagen dolorosa de la Virgen la cual ha llegado a nuestros días y se supone realizada en 1630 aunque se desconoce su autor. Se trata de una dolorosa de candelero para vestir realizada en madera de cedro. La talla inclina su cabeza a la derecha y dirige la mirada hacia abajo. En tiempo reciente pasó por las restauraciones de Sebastián Santos en 1948 y 1952, quien además le retalló las manos en 1953, y por la de José Rodríguez Rivero-Carrera en 1984 realizándose también un nuevo candelero.







La hermandad siguió creciendo y asentándose por lo que era habitual realizar la estación y la celebración de todos los cultos que las ordenanzas establecían sobre todo la función que se dedicaba con motivo de la festividad de la Encarnación a finales del mes de marzo. De los pasos que poseía la hermandad se decía que “ el de la Virgen era el mejor que en nuestros días se conocía”.

A mediados del siglo XVIII se sabe que la capilla hizo las veces de parroquia por el daño sufrido por la de Santa Ana durante una riada. Ese mismo Guadalquivir, tan beneficioso en otros casos con Sevilla, en una de sus crecidas afectó considerablemente la capilla en 1792 desplomando los pilares y techumbre del edificio. La hermandad se vio obligada a hacer un enorme esfuerzo económico para poder recuperar la capilla debiendo incluso de suspender la estación de penitencia en los siguientes años al destinar todos sus recursos a la recuperación de su sede, trabajos que se prolongaron hasta 1794 celebrándose una solemne función con este motivo y una procesión en la que la hermandad preparó incluso pasos para unas imágenes de San Rafael y San José además de la imagen de gloria.






Se rompe el Cristo de la Sangre

Llegamos pues al año 1808 cuando se produjo uno de los hechos más significativos de la historia de esta hermandad. Discurría la hermandad en procesión en procesión cuando la imagen del Santísimo Cristo de la Sangre se desprendió de la cogida del paso al romperse la espiga que sujetaba la cruz cayendo al suelo y haciéndose pedazo. El desafortunado suceso permitió encontrar un documento en su interior que acreditaba el año de su hechura así como los maestros que lo realizaron. Una vez restaurada, la imagen pudo volver a procesionar al año siguiente. El escrito decía: “En el año del nacimiento de nuestro Redentor de 1553 años, en el mes de marzo, se acabó la hechura de este santo Crucifijo, é ficieron la hechura de talla Francisco de Vega, entallador y Pedro Jiménez pintor; la pintura”.






Palomita de Triana

El viernes santo de 1845 la cofradía pudo realizar por vez primera la estación de penitencia hasta la catedral atravesando el puente de barcas. Para la ocasión se estrenaba el paso de Cristo, de estilo renacimiento mientras que los nazarenos vestían túnicas de cola color rojo en el acompañamiento del paso del Señor y negro en el paso de palio. Precisamente en estos últimos años el palio portaba en la gloria del techo una paloma, por lo que la Virgen comenzó a ser conocida como “Palomita de Triana”.







La hermandad vivió un periodo de decadencia que le llevó a procesionar por última vez en 1847. Con la cofradía en pleno proceso de reorganización, la junta revolucionaria decretaba en 1868 el cierre y destrucción dela capilla por lo que las imágenes y enseres se depositaron en las iglesias de Santa Ana y San Jacinto pasando después la imagen del  crucificado fuera de  la ciudad mientras que la Virgen llegaba en 1875 a la iglesia de San Benito.






El barrio de La Calzada

Tras unas décadas difíciles, en 1921 el cardenal Almaraz procedía a dar el visto bueno a la nueva reglamentación que había de regir la cofradía y en la que ya se estipulaba que la sede canónica sería la iglesia de San Benito además de incluir en el título la “Sagrada Presentación de Jesús al Pueblo” y fijar el día de salida en el martes santo. Al año de la aprobación de las reglas tenía lugar la estación de penitencia la cual se realizó con dos pasos. En el primero se podía contemplar una imagen de Jesús maniatado y presentado al pueblo aún en solitario que había tallado Esteban Domínguez. 



Antiguo Señor de la Presentación al Pueblo de San Benito. Una imagen que actualmente se encuentra en la hermandad del Cristo Redentor Cautivo de la localidad de Villanueva del Río, ejecutada por el imaginero Esteban Domínguez.







El segundo de los pasos iba la Virgen de la Encarnación bajo palio con enseres prestados por varias hermandades. La túnicas en este caso eran blancas con antifaz y capa negra en el Cristo mientras que los nazarenos de la Virgen usaban túnicas y antifaz de color crema con capa roja.

La imagen de Cristo realizada por Esteban Domínguez se encuentra en estos instantes en la localidad de Villanueva del Río donde recibe culto como Jesús Cautivo. En 1922 la hermandad lo sacó en procesión en unas andas cedidas por la hermandad de la Vera-Cruz.






La procesión de 1928



El actual grupo escultórico de la Presentación al Pueblo salió por primera vez en 1928. Como se puede apreciar, en principio salió en un paso de madera muy simple. El Señor de la Presentación portaba en origen una túnica de telas encolada.











Misterio de la Presentación al Pueblo en 1928, saliendo de templo. Estrena las figuras incluido el Señor, de Castillo Lastrucci. Acompañaba la BCT de San Juan de Aznalfarache.








Tras la estación de penitencia de 1922, la cofradía no volvería a salir hasta 1928 cuando se estrenaba el misterio de Antonio Castillo Lastrucci. También se estrenaron las túnicas que hoy en día continúan vistiendo los nazarenos consistente en saya y capa blanca con antifaz de terciopelo morado.



Boceto de Antonio Castillo Lastrucci para  el misterio de San Benito.














Curiosa estampa del Misterio de San Benito el día que fue presentado a los hermanos. 
Año 1928.












El paso de la Sagrada Presentación al Pueblo, en la calle Oriente, dirigiéndose a la Puerta de Carmona, el 3 de abril de 1928. Se estrenaba el Misterio y las túnicas de nazarenos actuales.









Los dos pasos, por entonces de la Hermandad de San Benito en la Parroquia de San Roque tras los daños sufridos por las fuertes riadas y su templo tuvo que estar cerrado al culto desde 1948 hasta 1952.
El paso de misterio es el que actualmente posee la Hermandad de Santa Marta de Jerez de la Frontera.
 
 
 
 
 
 
 

Antiguas andas del misterio de San Benito, actualmente en la Hermandad de Santa Marta de Jerez de la Frontera.













ECCE HOMO

El misterio del “Ecce Homo” con Jesús presentado al pueblo por Poncio Pilato representaba a Cristo sujetado con una soga por un esclavo negro que lleva un látigo en una de sus manos. Junto al Cristo, una impresionante imagen de Pilatos en el momento de perecer asomarse ante la multitud que esperaba su veredicto. Contemplan la escena un soldado romano con una lanza en su mano izquierda y una trompeta en la derecha, un miembro del sanedrín que porta la sentencia y, en la trasera del paso, junto al trono de Poncio Pilatos, Claudia Prócula esposa del procurador, su sirvienta y un centurión romano que porta el Senatus.







 El Señor fue restaurado por el propio Antonio Castillo Lastrucci en 1949 y por José Rodríguez Rivero-Carrera en 1988. En cuanto al misterio, Herrera y Feria procedieron a la encarnadura de las figuras excepto la del Cristo labor que volvió a repetir en 1983 Francisco Berlanga. El profesor José Roda Peña escribió que “se trata de uno de los conjuntos procesionales más conseguidos, desde el punto de vista compositivo, por Antonio Castillo Lastrucci”. 










En el 2003 salió en procesión extraordinaria el Señor de la Presentación al Pueblo, de San Benito, con motivo del LXXV aniversario de su realización.







La mayoría de los expertos consideran que, con toda seguridad, el imaginero se inspiró en un lienzo sobre el mismo tema que pintó en el siglo XIX Antonio Ciseri. Se sabe que el propio Castillo Lastrucci ejecutó una réplica en 1955 para que fuera colocada en la catedral de San Patricio en Texas tras ser requerido por el obispo Odonohoe. 




Ecce Homo.  Antonio Ciseri, 1871. Galería de Arte Moderno, Florencia, Italia.







Hasta dos años después del estreno del misterio no se produciría la salida de la Virgen bajo el palio bordado realizado por Juan Manuel Rodríguez Ojeda.


Virgen de la Encarnación, en su paso de palio, en los años 40. Desde 1930 tenía el palio de Rodríguez Ojeda, pero sus demás enseres, modestos, se mejoraron con los años.









Virgen de la Encarnación, 1931, bajo el palio de terciopelo granate de Rodríguez Ojeda. Estrenaba respiraderos de Francisco Picone y candelabros de Angelines y Moya
.













Ntra. Señora de la Encarnación en la calle Oriente, antes de entrar en el puente que se inaguró en 1931, y por el que, desde entonces accedió a la Puerta de Carmona. La instantánea refleja la realidad de 1934, cuando salió el Domingo de Ramos con el palio ya bodado y el manto aún no. En el frente, el caserío del barrio de la Calzada que desapareció por completo en las décadas de 1960-1970.








De nuevo una crecida del río vino a interponerse en la historia de esta corporación ya que en 1948 debió de cerrarse la iglesia de San Benito. Po este motivo hubieron de trasladarse las imágenes hasta la residencia de ancianos de las Hermanitas de los Pobres aledaña al templo.


El Señor de la Presentación saliendo de San Roque en 1948, en el paso del Corazón de Jesús, tras los daños de la riada.









Martes Santo de 1948, tras sufrir los importantes efectos de una riada eb su templo la Hermandad de San Benito tuvo que salir desde San Roque y sin la mayoría de sus enseres, el Señor procesionó solo, sin su misterio, en el paso del Sagrado Corazón de Jesús, de la Parroquia de la Concepción
. 







No sería hasta 1966 cuando el cardenal Bueno Monreal bendecía la nueva imagen del Santísimo Cristo de la Sangre que la hermandad había encargado al Francisco Buiza. La talla fue realizada en madera de pino flandes y representa a Cristo fijado a la cruz por tres clavos, tras su muerte y ya herido por una lanza con una policromía en la que se observa abundante sangre en todo el cuerpo. 


La bendición del Cristo de la Sangre, en 1966, por el cardenal Bueno Monreal. Un año después realizaría su primera salida procesional.












El Cristo de la Sangre se pone en la calle por primera vez, como segundo paso de la Cofradía de la Hermandad San Benito el 21 de marzo de 1967.










La imagen fue iniciativa de la junta presidida en aquel entonces por Manuel Ponce Jiménez quien fue la persona que donó su hechura. El encargo se demoró durante cuatro años debido a un accidente del artista. La corona de espinas está tallada en la propia cabeza y en el año 2000 el profesor Juan Manuel Miñarro procedió a la restauración de la imagen. El 18 de febrero de 1991 el Cristo de la Sangre presidió el Vía Crucis de las Hermandades de Sevilla que organiza el Consejo de Cofradía.













Un mismo paso en dos catedrales distinta en la Semana Santa de 1966




Misterio de la Presentación al Pueblo en la década de 1930. En 1928 se estrenaba todas las figuras del misterio, obras de Castillo Lastrucci. 
Este paso queda inservible tras la inundaciones de 1948.




En la Semana Santa de 1945 se estrenaron unas andas de estilo barroco para el misterio de la Sagrada Presentación de Jesús al Pueblo. Estas fueron diseñadas por Juan Pérez Calvo y ejecutadas por José Gallego. 

Juan Pérez Calvo fue el autor de diversos pasos de la Semana Santa sevillana. Diseñó las andas procesionales de diferentes Hermandades como el Baratillo, la Macarena o la del Dulce Nombre. De esta última era hermano y por ello también diseñó un paso para el Cristo del Mayor Dolor. 









Misterio de la Presentación sobre las andas de Juan Pérez Calvo, estrenadas en 1945.





Tras algunas ampliaciones, modificaciones y una restauración por parte de Antonio Castillo Lastrucci, Herrera y Feria o Antonio Martín, la Hermandad aprueba en 1966 la realización de unas nuevas andas procesionales a cargo de este último.

Este hecho llega a los oídos de la Hermandad de Santa Marta de la localidad de Jerez de la Frontera, que se fundó en 1958 y que necesitaba un paso en vista del estreno de su nuevo misterio.



Misterio de Santa Marta, Jerez de la Frontera.




Por ello la Hermandad vende sus andas procesionales a la Hermandad de Santa Marta y curiosamente procesiona por última vez en la Calzá y por primera vez en Jerez la misma Semana Santa.

El Contrato fue firmado el 5 de febrero de 1966. En él se especificaba curiosamente qu si en la Semana Santa del año siguiente el misterio de la Hermandad de San Benito no podía salir sobre sus nuevas andas, sería la corporación jerezana quien cedería el paso.




Salida del misterio de la Presentación al Pueblo, desde el Templo de San Roque, al Martes Santo de 1952, año en el que estaba aún en obras la Iglesia de la Calzada tras los daños sufridos en la riada de 1948.
En paso que se ve en la imagen fué el que sustituyó al paso dañado por las inundaciones del Tamarguillo y que ue venddo a la Hermandad de Santa Marta de Jerezriada.






Tras la Estación de Penitencia el Martes Santo de 1966, las andas se transportaron en la mañana del Miércoles Santo a Jerez de la Frontera, donde también salieron a la calle el Sábado Santo.

El Martes Santo del año siguiente se estrenó el nuevo paso de misterio en fase inicial, que es el que hoy en día sigue procesionando.



Actual paso de misterios de la Sagrada Presentación de Jesús al Pueblo




Al igual que sigue procesionando el antiguo paso de San Benito por las calles jerezanas.



Misterio de Santa Marta de Jerez de la Frontera sobre el antiguo paso del misterio de San Benito.



Vía Crucis de Sevilla

El 18 de febrero de 1991 el Cristo de la Sangre preside el Via-Crucis de las Hermandades de Sevilla que organiza cada cuaresma el Consejo de Cofradías. 






Una corona en Martes Santo

En 1967 la nueva talla del Cristo de la Sangre tallada por Buiza procesiona por primera vez a la Catedral, mientras que el martes santo de 1971 el cardenal Bueno Monreal bendecía e imponía a la Virgen de la Encarnación la corona de oro de ley que había sido donada por sus hermanos y devotos realizada por el orfebre Fernando Marmolejo como culminación de los actos del cincuentenario de la reorganización de la cofradía. Esa misma corona fue la que sirvió en 1994 para coronar canónicamente a Nuestra Señora de la Encarnación en las naves catedralicias.






El 10 de diciembre de 1994 la imagen se encontraba en su paso de palio en la Catedral donde se celebró un solemne pontifical en el que el arzobispo Carlos Amigo expresó durante la homilía que “de una manera especial queremos venerar hoy esta imagen con una corona de singular hermosura, queremos coronar a María con lo más querido que Dios nos dejó sobre la tierra: con el amor de la familia”.





La corona que, como decimos se realizó en 1971 por Fernando Marmolejo, lleva inscrita en el aro la salutación del Arcángel San Gabriel y que dice “Dios te salve María, llena eres de gracia”. El canasto está formado por adornos vegetales y querubines con una pequeña imagen del Arcángel realizada en marfil y los escudos de las órdenes militares de Santiago, Calatrava, Montesa y Alcántara y el capelo episcopal. La ráfaga es calada y se adorna con elementos vegetales y azucenas con rayos biselados con veintidós estrellas.



Cartel de la coronación de la Virgen de la Encarnación en 1994. Pintado por Dubé de Luque, incluía el lema de la coronación "Madre de la Familia Hispalense".





Túnica de procesión

Los nazarenos deben llevar túnica y capa blanca, botones morados en la delantera de la tunica y en las bocamangas. Cíngulo morado anudado al lado izquierdo, guantes blancos, zapatos negros y calcetines blancos. Antifaz de terciopelo morado con escudo bordado a la altura del pecho. Escudo de capa bordado al lado izquierdo










El detalle




Estandarte corporativo, bordado en oro y sedas por Leopoldo Padilla Vic, con asta de Manuel Villarreal (1959) y remate de Manuel de los Ríos (2003). Fue restaurado por Artesanía Santa Bárbara en 1986 y 2014. 












Frontal de la canastilla del paso del Cristo de la Sangre. 
De estilo barroco diseñado y tallado en madera de pino de Flandes por Antonio Martín Fernández (1967-69), iluminado por seis airosos candelabros de guardabrisas, siendo la ebanistería obra de Francisco Bailac.
La canastilla se adorna con cuatro cartelas con las distintas piezas del escudo de la Hermandad, de Martín, y otras cuatro con escenas de la vida de Cristo, de Francisco Buiza, autor del Cristo de la Sangre.
Restaurado en el 2023.







Cartelas del paso del Cristo de la Sangre 

 













El paso del Cristo de la Sangre cuenta en la delantera con una talla del Ángel Custodio debido a la vinculación del crucificado con la Policía que le tiene por patrón. La talla del ángel es de madera policromada y estofada, obra de Francisco Buiza (1969) y restaurada este año por Juan Manuel Miñarro. 



























 De Buiza son los cuatro evangelistas de las esquinas del paso del Cristo de la Sangre, que estaban colocados, de izquierda a derecha, en el siguiente orden: San Lucas, San Juan, San Mateo y San Marcos. Todos son de madera policromada y estofada (1969).












Escucha algunas de las marchas dedicada a los titulares de la hermandad.


25º ANIVERSARIO, ENCARNACIÓN Abel Moreno Gómez 2018

CORONACIÓN EN LA CALZADA Pascual González Moreno 1994

CRISTO DE LA PRESENTACIÓN Abel Moreno Gómez 1985

ENCARNACIÓN Cristóbal López Gándara 2017

ENCARNACIÓN CORONADA Abel Moreno Gómez 1994

ENCARNACIÓN DE LA CALZADA Juan de los Santos Sánchez Franco 1983

HIMNO A LA CORONACIÓN DE LA VIRGEN DE LA ENCARNACIÓN Pascual González Moreno 1994

NUESTRA SEÑORA DE LA ENCARNACIÓN José Manuel Franco Gómez  2019

NUESTRA SEÑORA DE LA ENCARNACIÓN Pedro Braña Martínez 1971

PALOMITA DE TRIANA  Francisco José Escobar Lama 2004

Y en la calzá lo presentaron.  Pedro M. Pacheco Palomo

REINA DE LA CALZÁ Javier Calvo Gaviño 2004

REINA DE LA ENCARNACIÓN Ignacio Borrego González 2013

REINA Y MADRE DE LA ENCARNACIÓN Carlos Guillén González 2016

VIRGEN DE LA ENCARNACIÓN  José Campano Bravo

 ¡CRUCIFÍCALO!  López Gándara.  2024 









Video: El Llamador Sevillano 






Bibliografía

Enciclopedia de la Semana Santa de Sevilla del El correo de Andalucía
Historia de las cofradías de Sevilla del ABC
Sevilla en sus cofradías de Rafael Jiménez Sampedro
Sevilla y su Semana Santa memoria de un siglo de ABC
https://sevilla.abc.es/pasionensevilla
http://periodistacofrade.blogspot.com

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