Historia de las Hermandades de Sevilla: La Hiniesta




Real e Ilustre Hermandad Sacramental de la Inmaculada Concepción y Primitiva, Franciscana y Cisterciense Cofradía de Nazarenos de la Piedad de Nuestra Señora, Santísimo Cristo de la Buena Muerte, Santa María Magdalena y María Santísima de la Hiniesta Dolorosa y Gloriosa Coronada.






Oculta en Cataluña

Para referirnos a los antecedentes históricos de esta corporación hemos hacer referencia a las crónicas de Bermejo y Carballo donde relata el sitio de la ciudad de Sevilla en el año 432 por el rey vándalo Gunderico. En esa fecha una imagen de la Virgen era escondida en San Julián para que no cayera en manos de los bárbaros.

La imagen de la Virgen se supone sería la que presidía el templo que manó construir en la ciudad el primer arzobispo hispalense, San Pio. Se trataba de una representación de la Virgen con el niño en brazos. Siglos más tarde, durante la dominación musulmana, la imagen fue trasladada hasta el norte, hasta Cataluña, donde sería escondida junto a una nota que indicaba su procedencia y donde sería encontrada en 1380 por el aragonés Mosén Per de Tous que estaba de cacería por los montes catalanes. El hallazgo fue “entre unas retamas, que en lengua catalana se llamaban iniesta” de las que tomaría el nombre la imagen.

Tras este  hallazgo la imagen fue devuelta a la ciudad donde adquiriría el patronazgo de la misma al ser la primera de las imágenes marianas que volvieron tras la reconquista. Fue colocada en San Julián donde a los pocos días de llegar la imagen fue tapiada la puerta por donde entró para que nadie pudiera acceder al templo por el mismo lugar por el que entró la Virgen. En San Julián, en 1407 Mosén Per Tous construyó una capilla para la Virgen en la cabecera de la nave del evangelio con derecho a enterramiento familiar y que estaba presidida por la Virgen flanqueada las imágenes de San Onofre, Santa Catalina, San Roque y San Sebastián que habían sido encargadas a los prestigiosos escultores de la época Gaspar del Águila y Juan de Oviedo.

De primero del siglo XV data esta antigua hermandad impulsada principalmente por los adres franciscanos y cuyas primeras reglas recibieron la firma de la autoridad en 1412 y que estaba compuesta por personas nobles y principales y que rendía culto a la primitiva imagen de la Virgen de la Hiniesta Gloriosa que se perdió en el incendio de la parroquia de 1932,  a un Cristo crucificado y una Virgen dolorosa.

En 1480, el clérigo Luis Alfonso dejó a la hermandad unos edificios situados “a espalda del Sagrario, del templo de San Marco”, con el fin de que la hermandad fundase un hospital que se ubicó frente a la iglesia de Santa Isabel y que estuvo bajo la protección del gremio de hortelanos. Cuenta Bermejo y Carballo que “este hospital estaba situado en la esquina de la calle Rascamejas”.






Soy de Sevilla

La nota que se encontró junto a la imagen decía “Sum Hispalis de sacello and portem quod ducit ad Cordubam
La traducción sería: “Soy de Sevilla, de un templo que se encuentra en la puerta que conduce a Córdoba”.





La procesión más solemne

El rey Felipe II mandó por real célula de 1588 “que todas las poblaciones de reino saquen en procesión la imagen de la Virgen de mayor antigüedad y devoción para suplicar el éxito de la invasión de Inglaterra por la Armada Invencible”. Cuentan las crónicas sobre la procesión con la Virgen de la Hiniesta que “fue de las más solemnes que se recuerdan en los anales religiosos de Sevilla





Hermandad de Sangre

No fue hasta 1560 cuando la hermandad se constituía como cofradía de sangre, titulándose de San Juan de Letrán y Nuestra Señora de la “Iniesta” saliendo el Jueves Santo desde el mismo hospital con un Cristo crucificado y una dolorosa. En 1568 se fusionaba con la hermandad “De las Ánimas” y a partir de 1580 la salida se efectuaba desde San Julián donde la hermandad se trasladó tras la desaparición de los hospitales benéficos. Ese año la Virgen fue llevada a la catedral en rogativa ante la sequía que padecía la ciudad repitiéndose este acto dos años después por una epidemia de peste.

En reconocimiento del patronazgo de  la Virgen sobre la ciudad, la corporación municipal instituyó en 1649 el voto a perpetuidad ante la Virgen tras una procesión que llevó a la imagen hasta la catedral en agradecimiento por el fin de la epidemia. Este voto se renueva todos los años los días 8 de septiembre. A finales de este siglo la hermandad pasó por unos años de escasa actividad llegando incluso a suspender la estación de penitencia al carecer de recursos suficientes.

En 1879 unos feligreses lograron revitalizarla gracias  al párroco Antonio Naranjo para lo que adoptaron la imagen dolorosa que poseyó la hermandad atribuida a Martínez Montañés y el crucificado atribuido a Felipe de Ribas, realizado en 1647 para el altar mayor de la parroquia. 
 El día de salida era el Lunes santo con un solo paso vistiendo los nazarenos túnica negra de cola. 





La primitiva Virgen de la Hiniesta, atribuida a la gubia del maestro Juan Martínez Montañés, que tristemente pereció y perdimos en el incendio intencionado de la Iglesia de San Julián, el Viernes 8 de Abril de 1932.









El antiguo Cristo de la Buena Muerte, de la Hiniesta, sobre 1900.









Imagen de 1935, con la segunda Virgen de la Hiniesta (obra de Castillo Lastrucci de 1933, perdida en 1936). Iba a los pies del Cristo, que procedía de la parroquia de San Gil








El palio de la Virgen de la Hiniesta saliendo en 1920. Los respiraderos son los adquiridos a la hermandad de la Amargura en 1916, obra del orfebre Cristobal Ortega.








Primitiva Virgen de la Hiniesta (talla atribuida a Martínez Montañés) por la calle Fray Diego de Cádiz, 1929. Palio de Rodríguez Ojeda, 1907 (pasado a nuevo terciopelo) y respiraderos adquiridos en 1916 a la Hermandad de la Amargura.








La reorganización

Tras la reorganización de 1879 el título de la hermandad recogía las advocaciones del “Santísimo Cristo de la Buena Muerte y Nuestra Señora de la Hiniesta en sus Misterios Dolorosos”. En 1883 incorporó un paso alegórico representando el triunfo de la Santa Cruz en el que el madero aparecía rodeado de nubes completado por los cuatro evangelistas y las tres virtudes teologales, la Fe (con los ojos vendados y portando el cáliz y la cruz), la Esperanza (portando un ancla) y la Caridad (con un ángel a los pies) bajo una gran palmera. 
Las andas de estilo neogótico realizadas en 1885. Salió de forma irregular, dejando de salir definitivamente y ser titular en la Hermandad en 1912.



Paso alegórico del Triunfo de la Santa Cruz hacia 1885, también conocido como el Triunfo de la Fe.







Durantes los años 1886 y 1891, la imagen del Cristo de la Hermadad de la Hiniesta formaba parte de este calvario. El Crucificado que centra la escena del Misterio es el realizado por Felipe de Rivas y que era cedido a la Hermandad por su propietario, el Marqués de la Granja. Quedó destruido el Crucificado, al igual que la Stma. Virgen atribuida a Montañés, en el provocado incendiode San Julián en 1932.






El Cristo de Felipe de Ribas era una joya, por no hablar de la soberbia dolorosa. Que lástima que por la pésima inteligencia y barbarie de algunos, nos privasen conocer aquellas maravillas. En el ático del altar mayor de San Lorenzo, se encuentra uno muy similar de su autoría.








El horror de 1932




Primitiva imagen de la Hiniesta, de escuela montañesina, que ardió
 en el incendio de la parroquia de San Julián, en 1932






En las primeras horas del viernes 6 de abril de 1932 fue consumida por las llamas la histórica parroquia de San Julián, sede de las hermandades de la Hiniesta y del Rosario. Un incendio provocado que redujo a cenizas excepcionales obras de arte como su retablo mayor de Felipe de Ribas, la imagen medieval la Virgen de la Hiniesta, la Dolorosa atribuida a Martínez Montañés o la Virgen del Rosario. 




Retablo principal desaparecido.





Retablo dedicado a San José, siglo XVIII.





Circuncisión del Niño, atribuido a Alejo Fernández.





Lienzo con la Hiniesta Gloriosa.





La primitiva Vigen de la Hiniesta en una foto previa a su restauración.





Imagen de Santa Lucía atribuida a Martínez Montañés. 





Detalle del Crucificado del retablo mayor, que sería titular de la Hermandad, atribuido a Felipe de Rivas, realizado en torno al 1647.





Primitiva Dolorosa de la Hiniesta.




Como ha estudiado Emilio Balbuena, el incendio provocó una honda conmoción en la sociedad sevillana, llegado a ser motivo de discusión incluso en el Parlamento de la nación. El fuego se inició antes de las dos de la madrugada, siendo avistado por un vecino que paseaba por la calle Duque Cornejo y que avisó a bomberos y Guardia Civil, que encontraron taponada la boca de riego más cercana. El fuego comenzó por la puerta lateral que da a la plaza de la Moravia, pudiendo el sacristán salvar algunos de los enseres de la sacristía. Pasadas las cinco el P. fray Sebastián de Ubrique, guardián del cercano convento de Capuchinos, consiguió, con la ayuda de los bomberos, salvar las formas guardadas en el Sagrario y la Inmaculada atribuida a Alonso Cano. Al amanecer, de la iglesia apenas quedaban sus muros y numerosos escombros.



Interior de San Julián antes del incendio.





Bomberos y vecinos alrededor de la parroquia de San Julián, abril 1932.






Fachada sur, previa al incendio.







Ruinas del templo tras el incendio.






La hermandad de la Hiniesta perdió a sus titulares y la mayoría de los enseres. Todo apuntaba a un fuego intencionado. Pero esa misma tarde, en el Congreso de los Diputados de Madrid, el presidente Manuel Azaña, defiende que el incendio había sido fortuito. El cardenal Ilundain y el alcalde visitaron el escenario de la ruina la misma tarde.



Resto de la Dolorosa de la Hiniesta.







Resto de la Hiniesta gótica tras el incendio.





El 1 de julio fueron detenidos como presuntos autores del incendio Antonio Lagares Binot, más conocido como “La Bizca” o “María Alba”, de 18 años y Rafael García Aguilar, alias “La Pinocha” o “Custodia Romero”, de 16 años, dos individuos del barrio que reconocieron la autoría del fuego y varios intentos para quemar otro templos. Diversos testigos certificaron que los dos detenidos habían adquirido la gasolina en la droguería de la misma plaza de San Julián. El incendio terminó con la absolución de ambos aunque el fiscal pidió para ellos más de trece años de reclusión para “La Bizca” y ocho meses para “La Pinocha”.

La hermandad se trasladó a San Macos encargando la talla de nuevas imágenes a Castillo Lastrucci. La cofradía realizaba su salida en 1935 desde Santa Marina a pesar de residir en San Marcos ya con las nuevas imágenes. Al año siguiente se tiene noticia de que sólo sacaba un paso donde iban juntos el crucificado y la dolorosa. 




1932. Una imagen que pudo ser la Hiniesta. Esta Virgen la realizó el imaginero José Merino Román en 1932, la cual termino marchando a Málaga, recibiendo culto y procesionando en la Semana Santa de esa ciudad bajo la advocación de María Santísima de la Soledad.







1932 Otra imagen que estuvo a punto de convertirse en la segunda Virgen de la Hiniesta. La realizo el imaginero Antonio Bidón y Villar, y recibe veneración en Cartaya (Huelva), como titular de la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno.








1932. Y una tercera imagen que tuvo posibilidades de convertirse en la Virgen de la Hiniesta, realizada por el orfebre Cayetano Gonzalez.






 
1933: Segunda Virgen de la Hiniesta (Primera de Castillo Lastrucci, anterior a la actual), imagen esta que poco tiempo tendría de vida, por cuanto que pereció víctima de un nuevo incendio provocado el 18 de Julio de  1936 en la Iglesia de San Marcos, donde  radicaba provisionalmente la Hermandad precisamente a causa del incendio igualmente provocado 4 años antes en San Julián.










Salida desde Santa Marina en 1936.






Al año siguiente, fue la iglesia de San Marcos pasto de las llamas perdiéndose en el incendio la imagen de la Virgen que fue de  nuevo encargada a Lastrucci  mientras que el mismo artista realizaba una nueva talla del crucificados y de la Virgen de Hiniesta Gloriosa. Como en 1937 aún no tenía la hermandad las nuevas imágenes y no podía realizar la salida, una representación de la Hiniesta salió en el cortejo de la hermandad de la Amargura. Se abrieron unos años donde la hermandad estaba en San Luis si bien para salir lo procesión debía hacerlo de lugares distintos como por ejemplo los Terceros o la antigua iglesia dominica de Montesión


El primitivo Cristo de la Buena Muerte, de la Hermandad de la Hiniesta, que ardió en el incendio de 1932






Entre 1951 y 1958 la Hermandad de la Hiniesta tuvo a la recoleta calle de Santa Paula dentro de su itinerario, tal y como vemos en la fotografía, entrando en la plaza de Santa Isabel. El paso de palio se encontraba en pleno proceso de restauración y pasado a nuevo terciopelo de todos sus bordados, y por lo que se puede apreciar en la fotografía, algún tipo de incidente debió ocurrir para que el quinto varal permanezca oculto tras la bambalina del "palio de cajón".

Entre el público que contempla el discurrir de la procesión llama la atención el vehículo de tracción animal con el símbolo de una ganadería y el rótulo de "Cortijo Sevilla".















El paso del Cristo de la Buena Muerte saliendo de la capilla de la Hermandad de Montesión, en la plaza de los Carros, en 1940. Lo hizo por la puerta lateral y lo acompañaba la BCT de Aviación. Como curiosiadad, el paso llevaba los candelabros del "Acorazado Potemkin" (hermandad de la Amargura).








En San Martín

Entre 1941 y 1945 se estableció la cofradía en San Martín hasta que fuera reconstruida San Julián. No sería la última vez que abandonara la parroquia porque debido a la restauración de la cubierta de San Julián en 1972, la hermandad trasladó sus imágenes a la iglesia de San Luis de Los Franceses.


Actual imagen del Crucificado, obra de Antonio Castillo Lastrucci, fotografiado
 por Serrano el mismo día de su bendición en 1938







El paso del Cristo de la Buena Muerte de la Hermandad de la Hiniesta en los años 40 en San Martín. Por entonces su templo seguía en reconstrucción tras la Guerra Civil. 








El Santísimo Cristo de la Buena Muerte saliendo de San Martín en la posguerra.  






Cristo de la Hiniesta en la iglesia de San Martín en los años cuarenta del pasado siglo.  
El paso fue obra de Manuel Casana, lo tiene desde 1972 la hermandad de la Vera-Cruz de Tocina.






Cristo de la Vera-Cruz de Tocina sobre el antiguo paso del Cristo de la Buena Muerte, obra de Manuel Casana y que adquirió en 1972.









San Hermenegildo

De nuevo volvieron las obras a San Julián pero en este caso de una forma integral. Así,  en 1994, tras cinco años de obras, fue reabierta al culto San Julián, regresando a ella la hermandad que había residido mientras tanto en San Hermenegildo efectuando salida desde Santa Marina.





Tallas pasionales

En 1937 Antonio Castillo Lastrucci recibía el encargo de realizar una nueva imagen de dolorosa para que sustituyera a la que él mismo tallara en 1933 y que había desaparecido en el incendio de San Marcos que a la vez había sustituido a la pérdida en 1932. El deseo fue “que la ejecución se inspire en la obra cumbre que la Hermandad perdió, para que la devoción no se entibie, ni se extinga el fervor que es de abolengo en los hermanos que componen tan característica y típica Cofradía”.




En 1938 terminaba Lastrucci el crucificado, realizado en cedro, tercero que tendría la corporación tras lo de Felipe de Ribas y el de pasta que la hermandad recuperó de San Marcos. Se sabe que le sirvió de modelo al imaginero Manuel Gómez Lora. La talla, de acertado realismo recoge trazas de Mesa en el sudario a semejanza del que se representa en el Cristo de la Conversión de Buen Ladrón. José Pérez Delgado le hizo una nueva cruz en madera de cedro en 1992.




Hasta 1944 no se realizó por parte del mismo imaginero la imagen de María Magdalena que acompaña al crucificado. Es de talla completa y recoge el momento en que, arrodillada, clava su mirada en el Cristo mientras se lleva el brazo izquierdo al pecho. El escultor hubo de variar su primera versión pues el arzobispado consideró que aparecía con un hombro excesivamente desnudo para la moralidad de la época por lo que hubo de proceder a “tapar” el mismo. Fue restaurada en 1991 por José Pérez Delgado.





La túnica de nazareno

Tras la reorganización de 1879, los nazarenos vistieron túnica negra de cola, capirote negro y cordón rojo. En 1885 era túnica blanca de cola, capirote negro y cinturón de esparto. En 1906, la túnica fue blanca, antifaz de raso azul y cinturón de esparto. En 1914 los nazarenos de la Virgen estrenaron túnicas y antifaces de raso azul con los atributos parroquiales y una cruz, capa blanca con escudo estampado con  el Triunfo de la Santa Cruz, cordón de hilo azul y plata, zapatillas de charol con  hebillas y guantes blancos. El domingo de ramos de 1931 cambiaron en el Cristo el esparto por un cordón rojo. Este cordón rojo fue sustituido en 1946 por el franciscano y el escudo del antifaz por otro ovalado con una  cruz arbórea y un corazón con siete espadas. En el paso de  Virgen se suprimió su escudo de la capa por otro ovalado de cruz y corazón  con puñales. 

Las túnicas actuales datan de 1962, cuando los nazarenos del primer paso cambiaban otra vez la vestimenta por la que usaban antes de 1931, es decir, túnica blanca de cola, cinturón amarillo de esparto, capirote de raso azul, calcetines bancos y sandalias de color cuero. Este mismo año se suprimió en el paso de palio las zapatillas con hebillas de los nazarenos por sandalias de color negro.

La hermandad de la  Hiniesta fue la primera cofradía que usó capirote para procesionar tal y como lo conocemos en el día de hoy. Fue a principios del siglo XVI.









El Detalle


Cubillo de guardabrisa del candelabro de cola. Plata fundida. Orferería Delgado López. 20022.
Se ha incluido en los cubillos de los guardabrisas de los candelabros de cola de la Virge de la Hiniesta una minúscula Giralda y un escudo del Sevilla Fútbol Club. 













Corona de Salida de María Santísima de la Hiniesta Dolorosa realizada por Manuel Seco Velasco en 1957.
















Detalle del Simpecado de la hemandad donde figura la antigua imagen de la Hiniesta, 
destruida en el incendio provocado en San Julián.







Respiradero del paso de la Virgen de la Hiniesta. Plata repujada. Orfebrería Delgado López. 2004.
Cartela que representa la puerta de la parroquia de San Julián



 Elementos del paso del Cristo de la Buena Muerte.  (Antonio Martín, 1971)









Baldaquino de la Hiniesta Gloriosa que figura en la entrecalle del paso de palio el Domingo de Ramos, pero que durante todo el año se encuentra en el despacho del alcalde por ser la Hiniesta la Patrona del Ayuntamiento. La imagen, de marfil, es de Juan Vázquez Sánchez; la orfebrería de la Virgen es de Fernando Marmolejo (1963); y el baldaquino es de Manuel Seco (1986).









Estandarte corporativo de la hermandad, bordado por José Guillermo Carrasquilla en oro, plata y sedas de colores sobre terciopelo azul en 1967, con asta de plata de ley de Hijo de Juan Fernández, de 2013.









Sayas de la Virgen de la Hiniesta, de tisú de plata blanco bordado en oro y sedas, obra de José Ramón Paleteiro, de 2003. 







Sayas de la Virgen de la Hiniesta, del taller de Santa Bárbara, es también de oro y sedas sobre tisú (2009).








 Saya procesional de la Virgen de la Hiniesta, bordada en oro sobre terciopelo burdeos por Rodríguez Ojeda en 1916. Ha sido restaurada este año por Manuel Solano, que ha recuperado elementos de su diseño primitivo, como las zonas de malla de oro.














Recuperada saya de Ojeda de principios del XX para la Dolorosa.
Es un proyecto realizado por la priostía de la hermandad y ejecutada por Francisco Sosa, 2021.













Saya de la Virgen, azul bordada en oro, realizada en el taller de Manuel Solano en 2019 y restaurada y enriquecida en el 2023.













Manto de salida de la Virgen de la Hiniesta, bordado en plata sobre terciopelo azul en 1906 por Juan Manuel Rodríguez Ojeda. Tiene un diseño simétrico con mayor profusión de bordados en el perímetro y en la zona inferior que en la zona central, donde se repite un mismo diseño. La toca de sobremanto, bordada en oro sobre malla, está incluida en el propio manto, mientras que la blonda de oro es de 1996.





























Techo de palio, bordado en plata y sedas de colores sobre tercipelo azul, con la gloria de madera policromada y plata, ya que representa a la Hiniesta Gloriosa. Es obra de Guillermo Carrasquilla, salvo la talla de la Virgen gótica, que es de José Pérez Delgado de 1985. El diseño reproduce el estilo juanmanuelino, salvo la gloria y los adornos que la rodean, de entre los que destacan doce rosas de pasión.























Escucha algunas de las marchas dedicada a los titulares de la hermandad.


"Buena Muerte en la Cruz". (2008). Germán García González.

"Costalero de San Julián". (1999). Manuel Rodríguez Ruiz.


"Cristo de San Julián". (1985). Manuel Rodríguez Ruiz.

"De San Julián al cielo". (2000). Germán García González.

"Jesús, tu Buena Muerte". (fecha desconocida). Francisco Arnáiz González.

"Magdalena bendita". (1995). Manuel Rodríguez Ruiz.

"Suspiros de San Julián". (2007). Manuel Rodríguez Ruiz.

"La Estrella Sublime". (1925). Manuel López Farfán.

"Hiniesta". (1945). José Martínez Peralto.

"Nuestra Señora de la Hiniesta". (1952). José Martínez Peralto.

"Hiniesta Coronada". (1974). José Albero Francés.

"Madre Hiniesta". (1997). Manuel Marvizón Carvallo.

"Azul y plata". (1997). Manuel Marvizón Carvallo.

"Hiniesta Madre sevillana". (2001). Manuel Jesús Navarro Sánchez.

"Hiniesta de San Julián". (2001). Pedro Morales Muñoz.

"Entre varales". (2010). Bruno Marvizón Carvallo.

"Virgen de la Hiniesta". (2012). Jesús Joaquín Espinosa de los Monteros Pérez.







Video de Cinturón de esparto 


Video de Alejandro González 








Bibliografía

Enciclopedia de la Semana Santa de Sevilla del El correo de Andalucía
Historia de las cofradías de Sevilla del ABC
La Semana Santa según ABC de Sevilla 1929-1946.
Sevilla en sus cofradías de Rafael Jiménez Sampedro
El poder de las imágenes, iconografía de la Semana Santa de Sevilla, del Diario de Sevilla 
https://sevilla.abc.es/pasionensevilla/
http://sevillalaleyenda.blogspot.com
https://cuestiondecofradias.blogspot.com



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