Olivares es un municipio de la provincia de Sevilla que se encuentra dentro de la comarca del Aljarafe. Está a orillas del río Agrio, afluente del río Guadiamar.
La Semana Santa de Olivares es una exposición de arte barroco en plena calle, que nos permite admirar la imaginería, la orfebrería, los sonidos y los sentimientos de este pueblo.
* Vera Cruz (Jueves Santo)
* Soledad (Viernes Santo)
Antigua y Primitiva Hermandad y Cofradía de Nazarenos de la Santa Vera Cruz, Preciosa Sangre de Nuestro Señor Jesucristo, Nuestro Padre Jesús Atado a la Columna, Santísimo Cristo de la Salud, Nuestra Señora de la Antigua, Santa Ángela de la Cruz y San Juan Evangelista
Fundación: Siglo XVI
Pasos: Dos.
Día de Salida: Jueves Santo
Hábito: Túnica blanca de cola, antifaz verde con el escudo de la Hermandad y Cíngulo del mismo color.
Sede Canónica: Capilla de la Santa Vera Cruz
Hay que remontarse a la primera mitad del siglo XVI para situar la aparición de la Hermandad de la Santa Vera-Cruz de Olivares, que estuvo muy vinculada, desde el principio, a la fundación del propio pueblo por el primer Conde de Olivares, don Pedro de Guzmán y Zúñiga que no era nacido en Sevilla, pero era sevillano de derecho ya que aquí vivió durante mucho tiempo. Fue alcaide de los Reales Alcázares y Atarazanas, y a este pueblo, capital de su Condado trajo el Noble, uniéndolas, las tradiciones religiosas más arraigadas en todo el Reino de Sevilla en aquella época: la devoción a la Santísima Virgen, bajo la advocación de la Antigua y la fundación de la Hermandad de la Santa Vera-Cruz a la que perteneció.
La primera sede de la Hermandad fue la Iglesia de Santa María del Álamo, y tomó el nombre de “Cofradía de la Santa Vera-Cruz y Preciosa Sangre de Jesucristo”. La Bula que el Papa Paulo III concedió en 1536 a todas las Cofradías existentes bajo la advocación de la Vera-Cruz, tuvo gran importancia porque se concedían trascendentales gracias e indulgencias a todas las personas, hombres y mujeres, que asistían con luz o penitencia acompañando al Crucifijo en la procesión.
Las primeras Reglas de la Hermandad de la Santa Vera-Cruz de Olivares datan del año de su fundación, 1552, y se ampliaron en 1596. La Cofradía realizaba la Estación de Penitencia en la noche del Jueves Santo en honor de las Cinco Llagas de Nuestro Señor Jesucristo en torno a sendas cruces de hierro forjado que aún permanecen en las entradas del pueblo.
Santísimo Cristo de la Salud
La adquisición de la imagen por la Hermandad se hizo en el último tercio del siglo XVIII, la realización de la misma debió efectuarse en el primer tercio del siglo XVII.
La Hermandad adquirió la imagen en Sevilla, pagando a José Caro 1.200 reales. El 22 de noviembre de 1773 el maestro carpintero Bartolomé González Daza, vecino de Olivares y hermano de la Hermandad, se comprometía ante los hermanos de la Santa Vera Cruz, a ponerse en contacto con un escultor sevillano para que tallase una nueva efigie para la Hermandad, siendo autorizado a reunir el dinero necesario pidiendo limosna. El 1 de enero de 1775 hacía entrega a José Caro de 175 reales, completando así la cantidad arriba indicada. Existen referencias documentales sobre un maestro pintor y dorador, pero no escultor, llamado José Caro que trabajó en Sevilla durante estos años.
El Santísimo Cristo de la Salud es un crucificado de tamaño natural de 1,79 metros de longitud, realizado en madera de pino policromada al óleo, según han identificado los técnicos del Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico tras la restauración efectuada entre septiembre de 2001 y marzo de 2002.
Nuestra Señora de la Antigua
La actual imagen de Nuestra Señora de la Antigua sustituyó a otra talla mariana primitiva de candelero y características góticas, pues siendo Hermano Mayor don Juan Antonio García del Río, en el año 1903, se enajenó la primitiva imagen de Nuestra Señora de la Antigua, salvándose el Niño Jesús que portaba en sus brazos y que continúa acompañando cada Corpus Christi a la imagen atribuida a Gabriel de Astorga.
Por los rasgos de la imagen, la historiografía artística ha venido vinculando la ejecución de la talla al imaginero sevillano Gabriel de Astorga y Miranda (1804-1895). Este mismo autor esculpió también en 1854 la magnífica imagen de la Inmaculada Concepción que se encuentra en la Colegiata de Olivares, y casi con toda seguridad el Niño Jesús de la Capilla de la Vera Cruz. Mucho más compleja resulta su datación exacta puesto que si bien es cierto que la mayor parte de la obra de Gabriel de Astorga se fecha en la década de los sesenta del siglo XIX, es muy complicado establecer una fecha concreta.
En 2004 la imagen fue restaurada con criterios científicos por doña Cinta Rubio Faure, licenciada en Bellas Artes y restauradora del Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico.
Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno, Santo Entierro de Cristo y Nuestra Señora de los Dolores en su Soledad
Fundación: 1712
Pasos: Tres.
Día de Salida: Viernes Santo
Hábito: Túnica blanca con botonadura morada, cola rizada y antifaz negro.
Sede Canónica: Iglesia Excolegial de Santa María de las Nieves.
Según consta en la edición original de las primeras Reglas que datan del año 1712, la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno y Nuestra Señora de la Soledad fue fundada en ese mismo año por un grupo de hermanos de la Hermandad de la Santa Vera Cruz que declaran sus intenciones en un escrito que encabeza las mencionadas Reglas en el que solicitan al Abad Mayor de la Colegial de Olivares Dr. D. Francisco Rico Villarroel licencia para proceder a la fundación de una Hermandad, manifestando que «… para más bien servir a Dios Nuestro Señor y a la Virgen Santa María su Madre y Nuestra Señora, hemos determinado fundar una Hermandad de Penitencia con el título de Jesús Nazareno y Nuestra Señora de la Soledad, en memoria y contemplación de la Pasión y muerte de Jesucristo nuestro bien, en el Paso de Nazareno cuando lo llevaron por la calle de la Amargura con la cruz a cuestas, y los Dolores que Nuestra Señora la Virgen María pasó viendo a su precioso Hijo y asimismo los que pasó después en su Soledad…, siendo el fin y motivo de nuestra intención que el Viernes Santo por la mañana salgamos en procesión por la estación que acostumbra la Hermandad de la Santa Vera-Cruz con la imagen de Jesús Nazareno, la de la Virgen y del Evangelista San Juan, considerando su Soledad santísima…», para lo cual necesitan que se funde una Hermandad y solicitan el beneplácito del Sr. Abad a fin de poder llevar a cabo la mencionada fundación y redactar sus primeras Reglas.
Por su parte, la autoridad eclesiástica dio licencia para que se redactasen las Reglas fundacionales el dos de marzo de 1712 mediante un auto del Rvmo. Abad Mayor ante el Notario Mayor eclesiástico de la Abadía de Olivares D. Cristóbal Navarrete.
La hermandad de la Soledad, tiene uno de los ritos más antiguos. La conocida «suelta de cola» se produce en la jornada del Viernes Santo cuando ya la noche cae en señal de duelo. Esta tradición cuenta con más de trescientos años de antigüedad y es conocida como «La vuelta al caracol».
Nuestro Padre Jesús Nazareno
Jesús Nazareno es una imagen de vestir, hecha en madera de ciprés, que data de mediados del siglo XVIII. En 1755 se cita por vez primera en los libros sacramentales de la colegial y aparece en todos los inventarios posteriores.
La imagen del Señor ha sufrido diversas restauraciones: sabemos que al menos desde finales del siglo XIX se cubrió su cabeza con cabellera natural, hasta que en 1954 le fue eliminada la misma y el escultor sevillano Manuel Cerquera le añadió un nuevo mechón tallado en el lado izquierdo.
Posteriormente, en 1975 el también escultor e imaginero hispalense Luis Álvarez Duarte tallaría otro mechón de cabello, esta vez en el lado derecho, labró un nuevo juego de manos y sustituyó el maniquí antiguo por un nuevo cuerpo que le otorgó mayor esbeltez a la imagen, a lo que hay que añadir los repintes y superposición de policromías en cabeza, manos y pies realizados en diversas épocas.
Tantas y tan variadas intervenciones en la talla habían llegado a ocultar casi por completo su primitivo aspecto, y no fue hasta el año 2001 cuando, con el tratamiento integral de conservación y restauración llevado a cabo por el profesor Juan Manuel Miñarro, se han recuperado sus valores plásticos, la composición y proporción general de la imagen, utilizando para ello fotografías antiguas, la recuperación en su integridad de los pies y manos originales y la eliminación de otros elementos formales añadidos, la recuperación de la policromía original, mediante una meticulosa labor de limpieza a bisturí, evitando la utilización de productos abrasivos que pudieran dañarla.
Santísimo Cristo Yacente
En 2003 la Hermandad recuperó para el culto una imagen de Cristo Yacente que se encontraba dentro de una urna en la cripta del antiguo templo colegial, junto al panteón donde yacen los restos de los dos primeros condes de Olivares y sus familias. Precisamente fue la circunstancia de conmemorarse en ese año el quinto centenario del nacimiento de don Pedro de Guzmán, primer conde y fundador de esta casa nobiliaria, y la creencia en que esta imagen del Señor había pertenecido a su familia, lo que determinó que se decidiera incorporar un nuevo paso con su efigie a la procesión penitencial del Viernes Santo. Sin embargo la iniciativa de restaurar y volver a dar culto al Cristo Yacente había partido tres años antes del grupo de jóvenes de la Hermandad, conocedores como eran de la tradición histórica que afirmaba que antiguamente ya se había venerado esta imagen por los cofrades de la Hermandad de la Soledad de Olivares; por ello, y dado el evidente deterioro que presentaba la misma, la junta de gobierno de entonces se puso en contacto con el catedrático de Bellas Artes en la facultad de Sevilla don Francisco Arquillo Torres, quien tras un primer reconocimiento certificó el interés histórico-artístico de la imagen, tras lo cual en octubre del año 2000 comenzó un proceso de restauración que fue llevado a cabo bajo su dirección en los talleres de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad Hispalense, y que se prolongó hasta los primeros meses del 2003.
Según el investigador Francisco Amores, “nos encontramos ante una imagen de Cristo muerto realizada con pasta y telas encoladas, que posee los brazos articulados, al objeto de poder realizarse con ella la ceremonia llamada del Descendimiento, como nos consta que se hizo en siglos pasados: precisamente por esta función la imagen presenta las características formales propias de un Crucificado, como son los brazos y piernas extendidos, la flexión de los dedos de las manos, la inclinación de la cabeza sobre el pecho en el lado derecho o la posición del pie derecho sobre el izquierdo, ya que antes de la mencionada ceremonia del Descendimiento el Señor se mostraba a los fieles clavado en la cruz, y posteriormente era depositado en la urna, motivo por el cual la imagen fue concebida desde su origen con los rasgos formales de un Crucificado que al mismo tiempo le permitiesen participar posteriormente en la escenificación del Santo Entierro”.
Sobre la procedencia de la imagen los datos e indicios son muy escasos. Por una parte se piensa que pudo ser donada a la Colegiata por los condes de Olivares en algún momento de los siglos XVII o XVIII, procedente de alguna de sus numerosas posesiones andaluzas y castellanas, si bien sobre este particular no existe testimonio documental alguno. Por el contrario, en los inventarios que se conservan de la iglesia colegial realizados en la segunda mitad del siglo XVII solamente se menciona la existencia de un altar «del Santo Cristo», que pudiera corresponderse con la imagen que comentamos, pero cuyo rastro desaparece completamente en los inventarios del siglo siguiente y los de los comienzos del siglo XIX: en este sentido no puede descartarse que la imagen hubiese estado todo ese tiempo depositada en la cripta o panteón de los condes, lugar al cual no se alude en los mencionados inventarios.
Nuestra Señora de los Dolores
La Virgen de los Dolores es una obra anónima atribuida al escultor sevillano José Montes de Oca de la primera mitad del siglo XVIII. Iconográficamente la imagen representa, tal y como pretendían los hermanos que encargaron su hechura los Dolores que la Virgen María pasó viendo a su Hijo y los que pasó después en su Soledad.
La imagen, a lo largo de su historia, ha sufrido diversas restauraciones. La primera de la que tenemos noticia es la efectuada por el sevillano Antonio Roldán Rodríguez en el año 1913, según consta en un trozo de tela que se halló adherido a su candelero sesenta años más tarde, conservado hoy en la casa de hermandad, y que presenta la siguiente leyenda: «Original de la Roldana, restaurada por Antonio Roldán en 1913».y que consistió, además de un posible cambio en el candelero, en ciertos retoques pictóricos en el rostro de la Virgen, que afectaron fundamentalmente al dibujo de las cejas, que se hicieron más gruesas, recurso frecuente para atenuar el “excesivo dramatismo” que impregnaba el escultor José Montes de Oca a sus imágenes dolorosas. Según el Sr. Amores, Antonio Roldán fue fundamentalmente un maestro tallista que tuvo taller abierto en Sevilla en las primeras décadas del siglo XX, aunque de él se conoce alguna otra incursión en el terreno de la escultura, como es el caso de la realización en 1901 de los modelos escultóricos del paso de la Hermandad de la Quinta Angustia, que después serían fundidos en bronce, aunque su mayor dedicación fue como decimos la talla de pasos procesionales, entre los que destacan el del Santo Entierro de Castilleja de la Cuesta, de 1912, el de la Oración en el Huerto de la Hermandad del Nazareno de Utrera, de 1917, los de la Quinta Angustia de Osuna y el Santo Entierro de El Arahal, ambos de 1927 y tallados ya en colaboración con su hijo del mismo nombre, y asimismo consta su participación en 1922 en la reforma del actual retablo del Cristo del Amor en la iglesia del Salvador de Sevilla.
Referencia:
https://es.m.wikipedia.org
http://www.destinosevillarural.com
https://sevilla.abc.es/pasionensevilla
https://veracruzdeolivares.com
https://miradyved.org
https://mobile.twitter.com/veracruzolivare
https://m.facebook.com/HermandaddelaSoledaddeOlivares
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